Crema de manos

Descripción del producto: La crema de manos de Ecoombú está especialmente diseñada para nutrir y reparar las manos gracias a su alto contenido de aceite puro de almendra, además, la manteca de mango y karité revitalizan y aportan elasticidad en manos secas y dañadas. Enriquecida con extracto de áloe vera, caléndula y avena, ingredientes que aportan hidratación y suavidad en forma prolongada, atenuando la sensación de sequedad y estimulando la actividad celular.

Beneficios: Los ingredientes botánicos que componen la crema de manos de Ecoombú brindan nutrición y reparación a las manos secas y dañadas, aportando también hidratación y suavidad de forma prolongada. Su delicado aroma a mango y su ligera textura de rápida absorción, proporcionarán un cuidado diario que rejuvenece tus manos.

Modo de uso: Aplicar la crema en el dorso de tu mano y esparcir por los dedos, dorso y palma de ambas manos, realizando un suave masaje hasta conseguir que el producto se alise.

Ingredientes: Aqua, Cetearyl Alcohol, Glyceryl Stearate, Sorbitan Stearate,Cetearyl Glucoside, Cetyl alcohol, Prunus Amygdalus Dulcis Oil, Butyrospermum Parkii (shea) butter, Mango Kernel Butter, Aloe Barbadensis Leaf Juice, Calendula Officinalis Flower and Avena Sativa Extract Tocopheryl Acetate.

Descripción de los principales activos:
1. Aceite puro de almendra: El aceite de almendras es elaborado a partir de un proceso de prensado en frío del fruto del almendro y de su posterior refinado, que conserva los nutrientes biológicos esenciales para el ser humano, obteniendo un aceite rico en grasas insaturadas y poliinsaturadas con muchas propiedades beneficiosas para el cuidado de la piel.
Gracias a la presencia de las vitaminas E y B, proteínas, glúcidos y sales minerales, este aceite se utiliza como cosmético y como remedio natural para la piel seca, irritada por el sol y produce efectos regeneradores y anti edad. El aceite de almendras no se limita a nutrir la piel, sino que también es eficaz para el cuidado del cabello y de las uñas.
Es ampliamente utilizado por su acción calmante y suavizante sobre la piel delicada gracias a su alto contenido en ácido oleico (60-80%) y ácido linoleico (20-30%).
El aceite de almendras ayuda a eliminar las impurezas, mantiene la piel elástica y proporciona hidratación profunda sin obstruir los poros, recuperando el bienestar natural de la piel. Es emoliente y tiene una rápida absorción.
Además, ayuda a combatir el envejecimiento y contribuye a la renovación celular de la epidermis, disminuyendo la formación de arrugas.

2. Manteca de karité: La manteca se extrae de los granos de karité por presión mecánica, los cuales pasan por un proceso de refinamiento para eliminar el látex natural que contiene el karité, evitando irritaciones en personas alérgicas al látex.
Está compuesta por una variedad de ácidos grasos que le brindan propiedades importantes para el cuidado de la piel, especialmente propiedades filmógenas, hidratantes y emolientes. Entre los principales ácidos grasos que componen la manteca se encuentran: ácido esteárico (15-25%); ácido oleico (60-70%); ácido linolénico (5-15%), ácido linoleico (<1%) y ácido palmítico (2-6%).
Contiene antioxidantes como tocoferoles (vitamina E) y catequinas, además, está compuesta por alcoholes triterpénicos que le brindan acción antiinflamatoria y lupeol, que impide los efectos del envejecimiento cutáneo, inhibiendo enzimas que degradan las proteínas de la piel.
Es regeneradora celular natural, calma pieles irritadas y es el producto más efectivo de los antienvejecimiento que existen en la naturaleza. Brinda un intenso y duradero poder hidratante y nutritivo en el cuerpo, con grandes propiedades suavizantes y reestructurantes.
Ayuda a proteger la piel de las radiaciones UVB y UVA actuando como protector solar ya que genera una película invisible que evita la deshidratación y la protege de agresiones externas como el sol, el viento y los cambios bruscos de temperatura.
Mejora la elasticidad de la piel por sus propiedades nutritivas y su alto contenido en vitamina F, componente vital de las membranas celulares.

3. Manteca de mango: La manteca se obtiene de los granos de mango descascarados, que pasan por un proceso de refinamiento, blanqueado y desodorizado. Contiene alrededor de un 10% de grasa sólida de color amarillo claro que se utiliza para la fabricación de productos cosméticos y jabones.
Entre sus componentes se destacan los ácidos grasos, específicamente, ácido oleico (41%), palmítico (10%) y esteárico (39%) rico en fitoesteroles que mejoran la barrera lipídica de la piel y la microcirculación, brindándole propiedades antiinflamatorias y de protección contra los rayos UV. Compuesta también por polifenoles que son poderosos antioxidantes que neutralizan los radicales libres y reestructuran la piel al estimular la síntesis de colágeno.
Además, se destaca por sus propiedades hidratantes, emolientes, suavizantes y nutritivas, con una buena estabilidad oxidativa que ayuda a la cicatrización de heridas y la regeneración de la piel. Por lo anterior, esta fórmula se utiliza en cremas de cuerpo y rostro con el objetivo de suavizar, calmar, hidratar, proteger e incluso restablecer la flexibilidad y reducir la degeneración de las células de la piel. Es apto para todos los tipos de piel, proporcionando mejoras y beneficios en todas ellas.

3.1. Aceite de mango: El aceite de mango se obtiene de las semillas de la Mangifera índica, más conocida como mango. Es un aceite ligero y no graso, rico en vitaminas y minerales beneficiosos para el cuidado de la piel.
Está compuesto principalmente por ácidos grasos esenciales como el ácido oleico, esteárico, palmítico, linoleico, linolénico y araquidónico. Además, contiene vitaminas A, E, C, D y del grupo B, ácido fólico y minerales como hierro, potasio, calcio y magnesio. Contiene también tocoferoles y fitoesteroles que son fuente de principios activos para la epidermis. Gracias a esta composición química, la estabilidad que presenta frente a la oxidación, su alta viscosidad y buena estabilidad de emulsión, es un ingrediente deseable en diversos productos cosméticos.
Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, cuya acción alivia la picazón e inflamación y reduce la aparición de manchas y cicatrices en la piel. Es también un ingrediente necesario para el tratamiento de afecciones de la piel como la dermatitis y el eczema.
Además, tiene propiedades regenerativas que ayudan a promover la renovación celular y a mantener la piel en un buen estado de salud. Así mismo, tiene acción hidratante y suavizante y restaura la barrera lipídica natural de la piel para devolverle su capacidad de retener humedad.
Tiene acción fotoprotectora y actúa como filtro solar, protegiendo la piel de los rayos UV y de las quemaduras solares.
El aceite de mango es apto para todos los tipos de piel, especialmente para pieles sensibles y escamosas ya que le devuelve la suavidad e hidratación diaria. También, se recomienda su uso en zonas del cuerpo donde la piel está endurecida ya que suaviza y alisa.

4. Áloe vera: Extracto vegetal de uso común que tiene propiedades calmantes, antioxidantes, antiinflamatorias, cicatrizantes, regenerantes e hidratantes para la piel, el cabello y las mucosas gracias a su gran capacidad para retener agua por su riqueza en mucílagos.
Es un ingrediente importante en muchos productos de cosmética ya que penetra las tres capas de la piel, expulsando bacterias y los depósitos de grasa que tapan los poros. Así mismo, es un ingrediente habitual en cremas y cosméticos que permiten cuidar las pieles grasas. Es recomendado para formular productos cosméticos con actividades reparadoras, calmantes y protectoras de la piel.
Además de ser rico en agua, el áloe vera es rico en vitaminas A, C y E, ácido fólico, colina, vitaminas del grupo B y minerales como el magnesio, el calcio, el zinc, el cromo, el sodio, el hierro, el potasio, el selenio y el cobre.

5. Vitamina E: La vitamina E es una vitamina liposoluble, cuyo papel principal es prevenir la oxidación de los ácidos grasos poliinsaturados. Por lo que es un excelente antioxidante natural que protege el tejido corporal contra los radicales libres que pueden dañar células, tejidos y órganos y previene la peroxidación de las grasas del cuerpo, siendo ideal para utilizarlo en productos de cuidado de la piel y el cabello. Además de fortificar las células de la piel, combate el envejecimiento prematuro del cutis, manteniéndolo fresco y radiante.
Es un eficaz agente hidratante - emoliente y mejora la elasticidad y tersura de la piel, por lo que, es especialmente adecuado para su uso en productos de protección solar y productos para el cuidado diario.
Muy eficaz en la protección y estabilidad de la vitamina C.
La vitamina E es muy utilizada en productos de cosmética natural que contienen aceites vegetales sensibles a la oxidación ya que alarga la vida útil del cosmético evitando que se oxide. Además, es un ingrediente activo antienvejecimiento.