Crema facial piel sensible

Descripción del producto: La crema facial Ecoombú combina las intensas propiedades hidratantes del ácido hialurónico con una textura ligera y fresca, que refuerza la barrera de la piel sin dejar una sensación grasa o incómoda.

Beneficios: La sinergia de sus componentes ayuda a calmar la irritación y aliviar las reacciones, dejando la piel suave y restaurada. Además, previene el envejecimiento cutáneo e impide la oxidación aumentando las defensas de la piel contra agentes externos de frescura e hidratación.

Modo de uso: Agrega un par de gotas de la crema en la palma de tu mano y esparce suavemente por todo el rostro dando palmaditas con tus dedos para alisar el producto.

Ingredientes: Aqua, Cetearyl olivate, Sorbitan Olivate, Sodium hialuronate, Calendula Officinalis Flower Extract, Avena sativa kernel extract, Tocopherol, Microcare PHDG.

Descripción de los principales activos:
1. Ácido hialurónico: El ácido hialurónico es un componente estructural natural de la piel, presente en el tejido conectivo de todo el cuerpo y en altas concentraciones permite la formación de tejidos como los cartílagos y la piel.
A medida que pasa el tiempo, se pierde un porcentaje importante de ácido hialurónico en nuestra piel, siendo necesario utilizar productos que contengan este componente para evitar la piel seca y la pérdida de volumen y firmeza. En cosmética natural se utiliza el ácido hialurónico de origen vegetal que proviene de fibras vegetales derivadas de celulosa fermentada por microorganismos, denominada también NASHA (Non-Animal Stabilized Hyaluronic Acid).
El ácido hialurónico se destaca por su capacidad para retener humedad, de hecho, se considera que tiene mayor capacidad de retención que cualquier otro. Además, tiene acción hidratante y alisador de arrugas ya que retiene el agua en la matriz intercelular del tejido conectivo, reduciendo las arrugas profundas desde el interior y permitiendo tener una piel más flexible.
Tiene también propiedades anti-envejecimiento, pues minimiza el adelgazamiento cutáneo y proporciona firmeza.

2. Caléndula: La caléndula es una planta aromática muy común de color amarillo con tonalidades naranjas y rojizas.
Esta flor posee propiedades antiinflamatorias, antibacterianas, antifúngicas y cicatrizantes que la convierten en un producto ideal para pieles sensibles y acneicas. Además, tiene características calmantes y protectoras que brindan un efecto relajante en la piel y hace que disminuyan las irritaciones en la dermis. Presenta un alto poder hidratante y nutritivo, siendo ideal para la piel irritada, las quemaduras de Sol, las infecciones de la piel y las pieles agrietadas. Así mismo, sus propiedades hidratantes promueven el aumento de colágeno y estimulan la cicatrización de la piel lesionada.
La caléndula es un emoliente que suaviza y tonifica la piel.
Debido a sus múltiples beneficios, la caléndula es uno de los ingredientes más utilizados en la cosmética natural, especialmente en pieles más sensibles. Es un ingrediente ideal para mantener la piel sana y nos aporta un extra de hidratación perfecto para lucir una piel bonita y reluciente en el día a día.

3. Avena: La avena es un cereal que presenta cualidades dermocosméticas muy importantes, que la convierten en uno de los principales activos en muchos productos de cosmética.
La cariópside de la avena está constituida principalmente por lípidos, proteínas, carbohidratos, minerales y vitaminas, que le brindan las propiedades más importantes a este producto.
El extracto de avena es apto para el uso en todos los tipos de piel, especialmente en pieles más sensibles y reactivas gracias a sus variadas propiedades dermatológicas y buena compatibilidad cutánea que permiten la absorción de la suciedad y los residuos celulares, respetando y cuidando la estructura de la piel, y a su vez, calmándola.
Este cereal tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Es también un gran acondicionador de la piel gracias a la presencia de proteínas y carbohidratos que permiten aliviar la irritación y picazón de la piel.
La presencia de saponinas en la avena permite que actúe como un jabón natural en la piel ya que tiene la capacidad de formar espuma, siendo capaz de limpiar la piel, ejerciendo un fuerte efecto antimicrobiano y antibacteriano. Por lo anterior, es muy recomendado para la formulación de productos cosméticos con acción purificante y antiséptica.
Gracias a la presencia de lípidos y substancias absorbentes de agua evita la deshidratación de la piel y mantiene la barrera protectora frente a agresiones externas.
Tiene acción emoliente, hidratante y antipruriginoso en la piel, permitiendo calmar las irritaciones cutáneas. Sus propiedades como emoliente contribuyen a aumentar la humedad de la piel, favoreciendo la regeneración celular.